Artesanías, las últimas tendencias para decoración del hogar
Aprovechando sus insumos tradicionales, los artesanos del Caribe crean innovadores objetos.
En el municipio de Santa Catalina, en Bolívar, no sabían qué hacer con la acumulación de basuras, pero hace un tiempo la diseñadora Vicky Hoyos les mostró que con las botellas de plástico se podían hacer objetos decorativos.
“Ellos hacen figuras representativas de la región, como el pescado, la gallina, estrellas y caballitos de mar, mejor dicho, todo lo que tiene que ver con su entorno”, dice Denis de León coordinadora de la marca Artesanos de Bolívar.
Cuando Danilo Cañizares, curador artístico de este programa –de la Gobernación de Bolívar, la Cámara de Comercio e Ixel Moda– conoció este trabajo y les dio unas ideas para hacerlos más modernos y atractivos para el consumidor final.
“Hablamos de estucarlos en blanco, pulirles las patas a la gallina, ponerle detalles dorados a la boca del pez y cosas así”, dice Cañizares.
Ahora, estas figuras se han convertido en un producto de identidad y representación de este municipio, como lo son las más de 12 expresiones artesanales que promueve el programa, el cual no solo busca dar a conocer estas artesanías, sino también rescatar técnicas y materiales ancestrales para preservar la tradición pero repensados para atender un mercado contemporáneo, citadino e internacional.
“Hay una tradición para recuperar y conservar; tenemos el conocimiento, la práctica y el don, pero llega el momento en que se necesita de otras personas, ser abiertos al tiempo que vivimos, a lo moderno, a los diseñadores, a las fusiones.
Este es un proceso que no es fácil para todos los artesanos, porque somos personas sensibles, apegadas a muchas cosas y nos cuesta el cambio, pero hay que hacerlo”, comenta Olimpia Buelvas, artesana de Turbaco.
Ella reconoce que su municipio no tiene una larga tradición artesanal como San Jacinto y Mompox, pero ahora aprovechan la madera del campano, un árbol propio de la región, y con lo aprendido en los talleres de capacitación del programa, han encontrado un nicho en la elaboración de bandejas con incrustaciones de madera.
“Tenemos una cooperativa conformada por unos 20 artesanos, la mayoría mujeres. Nos reunimos tres veces a la semana en un taller base para diseñar y hacer las piezas, y luego repartimos el trabajo para llevar a casa, porque el pulido y el encerado con cera de abejas se hace totalmente a mano”, comenta Buelvas.
En ese trabajo de recuperar técnicas y tradiciones de San Jacinto, reconocido por sus coloridas hamacas, ahora también hace cojines y tapetes, en los que combinan materias primas. Sin embargo, en la muestra de productos que Artesanos de Bolívar llevó a cabo en el marco de Ixel Moda en Cartagena esta semana, sus artesanos estaban orgullosos de mostrar la recuperación de una antigua técnica: el lampazo, que deja como un rayón de color para que este no se vea plano. “Lo que pasa es que es un poco costoso, por eso lo habían dejado de hacer, pero es precioso”, comenta Cañizares.
El programa crece y se va ampliando el portafolio de Artesanos de Colombia. Magangué entró con su tejido en trenza con palma de asará. “Esto se ha perdido un poco, porque los ganaderos mandan a cortar las palmas porque les raspa las ubres a las vacas, y ahora toca traerla de Magdalena y otros municipios. Como está escasa, la combinan con palma de coco”, cuenta De León.
“Yo vi los canastos que usan como canecas y los volteamos y pensamos en un puff. Así surgió este nuevo producto para ampliar las posibilidades de este tejido con el que también hacen abanicos”, cuenta Cañizares.
En Mahates también aprendieron a hacer nuevas cosas aprovechando su tradición alfarera. Ahora con el barro cocido y la técnica de la cerámica en mate hacen cosas como bandejas, bateas y fruteros. “Ellos trabajan las formas de las hojas de la región como la de ahuyama, plátano, piñón”, explica la coordinadora.
¿Por qué se acabará Internet Explorer? / Análisis
Otra línea de navegadores, que por ahora se conoce como Spartan, lo reemplazará.
Microsoft ha decidido acabar con la marca Internet Explorer (IE).El gigante de Redmond, Estados Unidos, continuará su línea de navegadores bajo otra denominación. Por ahora, se conoce que el sistema operativo Windows 10, que llegará al mercado a mediados de 2015, incorporará un explorador cuyo nombre preliminar, aunque de seguro no definitivo, es Spartan.
Microsoft mostró las primeras pinceladas de Spartan en una presentación llevada a cabo el pasado 21 de enero. El nuevo navegador contará con funciones orientadas a potenciar el uso de redes sociales y a mejorar la experiencia de lectura.
En Spartan, el usuario podrá capturar imágenes de las páginas de su interés y plasmar comentarios o dibujos sobre las mismas.
El Icfes evaluará este domingo a 161.392 colombianos
La prueba Saber 11 medirá cómo los estudiantes aplican sus conocimientos en problemas reales.
La evaluación de competencias ciudadanas, la inclusión de las preguntas abiertas y la disminución de las áreas evaluadas hacen parte de los cambios de la prueba Saber 11, que se realizará este domingo a cerca de 161.392 colombianos.
De este total, serán evaluados en Pre Saber 11, 39.227 personas; en Saber 11° calendario B, 115.649 y en validación del bachillerato 6.516. Estas pruebas serán aplicadas en todo el país.
Esta evaluación corresponde al mismo modelo que fue implementado en agosto del año anterior, el cual contiene cambios en contenido (preguntas y áreas), así como en enfoque, pues mide las competencias desarrolladas por los estudiantes en cada uno de los campos del saber durante el bachillerato.
Ximena Dueñas Herrera, directora general del Icfes, manifestó que “las preguntas se orientan hacia el saber hacer, es decir, cómo se aplica el conocimiento para la resolución de problemas en el entorno; con lo que lograremos alinear la Prueba Saber 11 a los demás exámenes que realiza el Instituto (Saber 3, 5,9 y Pro), como herramienta para medir la calidad de la Educación en Colombia”.
Los evaluados sólo podrán ingresar al sitio de la prueba con documento de identidad válido, lápiz de mina negra No. 2, borrador y tajalápiz. Están prohibidos: celulares, cualquier aparato electrónico o de comunicaciones, calculadoras, impresos o escritos, maletines y bolsos. Los resultados de las pruebas serán publicados en los meses de mayo y junio.
Las ciudades donde más personas aplicará al examen son: Bogotá con 34.462 colombianos, Cali con 16.726, Pasto con 7.904 y Medellín con 7.068 ciudadanos.
En cuanto a Saber Pro Patrulleros presentarán la evaluación 2.032 ciudadanos y 3.062 profesores realizarán la prueba Docentes Inglés. Villavicencio, Soledad, Tuluá, Facatativá, Santa Rosa de Viterbo, Manizales, Vélez y Espinal serán los sitios de aplicación.
La familia 'orgullo de Ucrania' que adopta niños con VIH
Son siete los menores portadores del virus. La pareja está en Bogotá dando un testimonio de su vida.
La historia de la familia Levgen parece a simple vista una tragedia: el padre es portador de VIH y siete de sus once hijos padecen la misma enfermedad (los siete niños enfermos fueron adoptados). Y la madre acaba de darse cuenta de que está embarazada. Viven en una casa arrendada en Kiev, capital de Ucrania, prácticamente amontonados.
Pero en su hogar –dicen– no hay cabida para la desdicha ni las angustias. No importa la precariedad y tampoco la amenaza de convivir con una enfermedad mortal. “Dios nos ha restaurado, nos ha dado una misión y nunca nos va a abandonar”, cuenta Isaiev, de 41 años y quien hace 23 es portador de VIH.
Los Levgen son la ‘Familia Orgullo de Ucrania’, reconocimiento que recibieron en septiembre del 2012 del Gobierno de su país, con el cual exalta a las personas que son ejemplo para la sociedad.
En el caso de los Levgen, fue por el hecho de haber adoptado a siete niños, todos enfermos de VIH y que habían sido abandonados. Estaban en orfanatos y varios de ellos eran además víctimas de maltrato físico.
“Cada niño, cada huérfano, debe tener derecho a una mamá y a un papá. Pero en Ucrania nadie adoptaba a niños con VIH”, cuenta Isaiev, quien, junto con su esposa, emprendió una campaña para que en su país se adopten niños huérfanos, pero, sobre todo, aquellos en condiciones difíciles.
Afirman que gracias a su testimonio, que vinieron a compartir en Bogotá, han logrado que en los últimos años más de 300 niños con este diagnóstico encuentren un hogar.
La pareja llegó al país con dos de sus hijas: Anna, de 9 años, y Oleksandra, de 15. A esta última la adoptaron hace seis años, y le daban pocos meses de vida. Además de VIH, padecía de tuberculosis.
“Creo en Dios con todas mis fuerzas. Él cambió toda mi vida y les pidió a mis papás que me llevaran con ellos. En este momento, estoy muy contenta, sana y agradecida con Dios y con mis papás”, dice Oleksandra, una jovencita bella y muy simpática.
Desde los 16 años, Isaiev conoció las drogas y luego pasó a la delincuencia. Estuvo tres veces en la cárcel –diez años en total– y, tras las rejas, conoció a un hombre que le dijo que podía salir adelante y ser una persona de bien si le entregaba su vida a Dios. Y lo llevó a una iglesia cristiana en Mariupol, donde conoció a Svetlana, quien también tenía un pasado lleno de dolor. A los 17 años, ella fue madre soltera de una niña.
Svetlana aceptó que Isaiev fuera portador de VIH. Fueron adonde su pastor a pedirle la bendición para casarse, pero él les recomendó que se dieran seis meses más, para que se conocieran mejor. Finalmente, se casaron.
Ella quedó embarazada. Pero en el momento del parto, en el hospital, la aislaron cuando supieron que su esposo era portador de VHI. Pese a que ella no padecía –ni padece– la enfermedad, asegura que la trataron como a una leprosa. Eran mellizos, pero solo uno sobrevivió: Anna, quien hoy tiene 9 años. La mujer espera otro bebé.
Fue entonces cuando a ella se le ocurrió la idea de adoptar a un niño, pero no uno común y corriente, sino un niño con VIH.
“La gente con VIH era cruelmente rechazada, y pensé que si a los adultos los trataban de esa manera, los niños sufrirían mucho más”, cuenta la mujer.
La primera adopción fue en el 2007, y en los años siguientes adoptaron a los otros seis. También adoptaron a uno más, sano, que les suplicó que lo llevaran a casa. Todos ellos se suman a los dos hijos biológicos de la pareja –que no fueron contagiados–, a la primera hija que tuvo Svetlana y al bebé que viene en camino.
“Mi vida y la de los niños son un milagro de Dios. Yo estoy sano, casi perfecto. Los médicos me daban tres años de vida y ya llevo 23 con esta enfermedad. Y la salud de los niños también está muy bien. Son muy juiciosos con los medicamentos”, dice Isaiev, y aclara que todos los niños conocen su diagnóstico y han sabido sobrellevar su realidad, sin temores ni traumas.
Además de una fe ciega en Dios, dice, el amor es el que reina en su familia. Cuenta que el hogar lo sostienen con la pensión que él recibe por su enfermedad y con lo que se gana como conductor. Los niños reciben un subsidio del Gobierno.
“Yo siempre viajo con una meta, con una misión, que es dar testimonio de lo que Dios hizo con nuestra familia. Queremos inspirar a la gente, para que entiendan que no hay problema que Dios no pueda solucionar”, añade Isaiev.
Pero, más que eso, cuenta su historia para que el mundo se conmueva y les dé hogar a niños huérfanos y abandonados, sobre todo a aquellos que están en una situación difícil.
No hay comentarios:
Publicar un comentario